ERES LO QUE CREES QUE ERES Y DESDE AHÍ ACTÚAS
Todas las semanas tratamos temas que veo en muchos de mis pacientes en terapia, hoy no es algo diferente: hoy te invito a desaprender sobre la persona que crees que eres:
-Inicio preguntándote ¿Qué historias te estás contando a ti mismo sobre ti mismo/a?
-Esto te hará dar cuenta qué etiquetas te estás poniendo y con cuál estás decidiendo mantener porque “así eres”, no porque quieras ser diferente.
-La etiqueta de “soy pobre” o “soy insuficiente” es la historia que te estás contando y estás viviendo desde esa historia.
-¿Cuántas veces te estás poniendo la ropa de “pobre” o “mendigo” y no te pusiste a buscar lo que realmente eres?
-Te enseñaron muchas cosas y te dijeron muchas cosas que no eres, tú eres responsable de decidir sobre la historia que te seguiste contando después de que te pusieron esas etiquetas o te comenzaron a enseñar cosas que no te funcionan.
-¿Qué tan apegado/a estás a esa etiqueta?, por ejemplo: si tu etiqueta es ser una persona “super amable”, qué tanto te está sirviendo o qué tan pegado/a estás a esa etiqueta el momento de decir NO por tu bien (y dejar de ser “super amable”).
-Cambiar esta etiqueta te permite dejar de ser prisionero de tus circunstancias, te permite estar en una incertidumbre que solamente te abre puertas a cosas inesperadas que irán más con una etiqueta o una historia que en serio te haga bien.
-No eres tus pensamientos, pero eres la suma de ellos, la suma de tus pensamientos, acciones y sensaciones: esto define tu auto-concepto, ¿qué estás pensando siempre, qué historias te cuentas para definir ese auto-concepto?
-El cambio asusta: el cambio es una amenaza, por eso siempre volverás a lo “familiar” (a tu sistema de creencias). A pesar de que ese sistema de creencias sea desadaptativo o disfuncional.
-Lo más probable es que este cambio, si tu sistema es disfuncional, será incómodo como cualquier cambio, pero cree que valdrá la pena. Así dejarás de contarte historias sobre ti mismo que no son verdad, o que quedaron en el pasado. Cuestiona tu sistema de creencias.
En este capítulo te invito a expandirte:
Define quién te estás diciendo que eres.
Te invito a ponerte en situaciones que normalmente no están en tu día a día (situaciones incómodas) para que puedas descubrir nuevos atributos y nuevas etiquetas “buenas” para que estas sean historias buenas que te cuentas a ti mismo, y desde ahí decidas cosas que te hagan bien.
Acepta lo que no te gusta de ti, para que la narrativa cambie y te sientas merecedor/a de cosas buenas.
-¿Qué estás eligiendo, la escasez o la abundancia? ¿Te estas contando cosas buenas o malas de ti mismo/a todos los días?
Creer que eres alguien que vale la pena y aceptarte es otro paso para alcanzar y conocer la magia.
Nos vemos la próxima semana.
Este es siempre, tu lugar ❤️